
Apasionada por el arte desde siempre, creció entre pinceles, telas y preguntas. Estudió pintura, diseño y moda: lenguajes distintos que le enseñaron a mirar con sensibilidad y a habitar el mundo desde la creación.
Para ella, el arte es un regreso. Un modo de habitarse y darle sentido a lo vivido. Giusini nace de una búsqueda honesta por dar forma al torbellino de ideas que habita su mente.
Un espacio libre, donde crear piezas que inviten a explorar la belleza del gesto y la materia.

A los ocho años se escapó unas cuadras para anotarse sola en un taller de pintura. Su madre, entre sorpresa y ternura, no tuvo más opción que acompañarla.
Sin saberlo, fue el comienzo de una pasión de por vida. A los catorce, llegó al taller de Walter Nadal junto a su padre. Allí, su técnica y sensibilidad florecieron. Durante más de cinco años, ese espacio fue refugio y escuela, dejando huellas imborrables.
A los quince, comenzó a estudiar moldería, un mundo que despertó en ella una curiosidad profunda.
Se formó como modista de alta costura y luego estudió Diseño de Indumentaria en la Universidad. A los dieciocho ganó su primer concurso en la Embajada de Francia con un diseño inspirado en la Torre Eiffel, que la llevó a conocer el Festival de Hyères.
Tres años después, ganó otro primer premio en MoWeek con una propuesta basada en el reciclaje, que la llevó a viajar a Nueva York abriendose a un mundo de posiblidades.
En su camino profesional, trabajó en marcas de moda, llegando a desempeñarse como Responsable de Diseño y Marketing.
Durante varios años desarrolló su carrera en Uruguay y, en paralelo, inició su propio emprendimiento de murales. Participó en más de 100 proyectos, incluyendo colaboraciones con marcas como Pandora, Sheraton Hotels y Sinergia, entre otras.

A los 28 años decidió emprender un viaje que le cambiaría la vida. Dejó todo atrás con el deseo de conectar con otras culturas y formas de vivir.
Vivió en Lyon, Sydney, Margaret River y Bali. Cada lugar le abrió la mente y el corazón, despertando en ella la necesidad de construir una vida más libre, creativa y auténtica.


Giusini por consecuencia, nace de una búsqueda constante de explorar el dibujo, la pintura, las texturas y las formas, en total libertad.
Es un espacio que busca comprender el interiorismo en su totalidad, ofreciendo piezas que aporten valor estético y soluciones visuales — tanto en pinturas y objetos, como en murales que transforman paredes en obras vivas y únicas.
Es también el reflejo del camino creativo de la artista, que pone el corazón en cada pieza, pensada para quienes desean habitar espacios con alma, belleza y diseño.